Las cortinas son un elemento indispensable para la decoración de un hogar, especialmente de aquellas estancias en las que hay una gran ventana, o una puerta que sale a la terraza, y que no sabemos muy bien como evitar que se vea ‘desnuda’.
Las cortinas son la opción perfecta para decorar una habitación, ya que nos ofrecen innumerables posibilidades estéticas. Por eso, es importante que tengamos claros unos trucos, que nos permitirán elegir cual es el modelo de cortina más adecuado para nuestro hogar.
Las cortinas drapeadas son una excelente opción para decorar, ya que nos proporcionan movimiento, a la vez que resultan elegantes en su simpleza. Además, son multiterreno, ya que son adecuadas tanto para salas, como dormitorios y comedores. Para asegurarnos de que quedan bien, denemos ponerlas de pared a pared, o solo tapando una ventana, nunca en dimensiones intermedias.
¿Nos apetece un toque más romántico? Combinar las cortinas con un dosel nos lo proporciona, además de crear un aire tranquilo y relajante, que lo convierte en ideal para habitaciones, incluso de bebés.
Las combinaciones de cortinas son otra opción decorativa muy interesante. Se hace habitualmente con las de tipo roller y las drapeadas, en lugares donde se quiere tapar la luz, pero tanto las cortinas venecianas, como las roller, no resultan estéticas para la habitación. Con la combinación, se ocultan y disimulan mutuamente.
También puede ser que vayamos a decorar una habitación que tiene una gran altura. En ese caso, las cortinas cortas crean el efecto óptico de reducir sus dimensiones. También se usan especialmente en la cocina, ya que generan un aspecto más casual, lo que resulta muy apropiado.
Finalmente, no podemos dejar de tener en cuenta que las cortinas se pueden usar para otras decoraciones que no sean las de las ventanas. Por ejemplo, pueden para separar el porche o el patio del jardín. Lo único a tener en cuenta es la elección de una tela resistente, ya que estará expuesta a la intemperie. Igualmente, podemos usarlas para separar espacios e, incluso, habitaciones en las que no tengamos una puerta instalada.