Una de las claves para conseguir una decoración especial para nuestra casa es la mezcla de estilos. Una decoración ecléctica debe ser el principal objetivo de una persona que se decida a arreglar cualquier ambiente. Con ella, conseguiremos un espacio mucho más rico.
Pero, por supuesto, no podemos mezclar objetos de estilos diferentes sin pensar y planificar las combinaciones resultantes, de manera que consigamos ambientes equilibrados y personales. Para empezar, hay que tener en cuenta algunos consejos básicos:
La clave está en olvidarnos de los ambientes minimalistas y neutros, y en que nos marquemos el objetivo de distinguir los ambientes con piezas y muebles que realcen el espacio. Para ello, nada mejor que coger las líneas puras y rectas que caracterizan el minimalismo, y añadirle toques de personalidad, en forma de complementos de diseño, objetos vintage o antigüedades.
Pero las posibilidades de mezclas para conseguir una decoración ecléctica en nuestro hogar son infinitas, y mucho más sofisticadas de lo que podamos pensar. Se pueden combinar piezas antiguas con las más innovadoras, de materiales revolucionarios, y también incluir en los ambientes piezas de otras culturas, pero siempre teniendo mucho cuidado de no caer en grandes excesos que pueden conducir a ambientes demasiado recargados.
Una de las claves de este tipo de decoración es que la combinación final de estilos debe acabar demostrando con su resultado la personalidad del dueño de la casa, que se expresará en cada uno de los muebles y las piezas decorativas colocados.
Debemos tener siempre presente el objetivo final de lograr que nuestra casa acabe siendo un espacio sobrio y funcional, pero esto no evita que no podamos arriesgarnos a escoger algunas piezas especiales de estilo barroco, y combinarlas con elementos de hoy en día. También puede ser una gran idea colocar un elemento decorativo oriental, y algún toque vintage, cuidando siempre de que la casa acabe siendo un espacio en equilibrio, donde reine un ambiente acogedor y agradable.