Siempre hablamos de que la decoración vintage está de moda en los últimos tiempos, pero la verdad es que pocas personas somos conscientes de lo que realmente significa este término. Para empezar, es importante que aclaremos que vintage significa ‘antiguo, de diseño artístico y de alta calidad’.
De hecho, el estilo de decoración vintage se basa en decorar una casa siguiendo el estilo antiguo, pero siempre combinado con elementos actuales y procurando dar a la estancia un aire romántico, a la par que elegante.
La base de esta decoración debe estar en el color blanco, que se combinará siempre con accesorios y muebles de tonos vivos, siempre procurando no mezclar demasiado tonos y texturas para evitar la sensación de barroquismo. Además, los protagonistas de la estancia deben ser la madera, el mimbre y la forja, junto con los textiles estampados en flores, principalmente.
Dentro del estilo vintage, uno de los más llamativos es el conocido como “Luis XV”, que recurre a sillas, sofás, mesas y armarios de estilo colonial para conseguir evocar un ambiente noble y majestuoso, casi digno de reyes donde la madera oscura de nogal, caoba o cerezo juegan un papel fundamental. Y el mismo estilo es válido para decorar un dormitorio señorial de estilo vintage, en el que predominará siempre un ambiente romántico, con toques de art decó.
Finalmente, no podemos dejar de lado el importante papel que juegan los accesorios en una decoración de estilo vintage. Las plantas y flores son esenciales para dar color y romanticismo, mientras que elementos como un teléfono de los años 50, un jarrón afrancesado, cestos de mimbre, baúles o relojes antiguos son siempre una buena opción a la hora de redondear una decoración de estilo vintage.
Los elementos de la decoración vintage,