A la hora de cambiar el mobiliario de tu empresa es necesario pensar cuál es el estilo decorativo que mejor se adapta al espacio de trabajo. Por eso, antes de comprar aquí cualquier mobiliario, debes saber bien qué es lo que deseas implementar para que el resultado final sea óptimo.
Es recomendable combinar formas y colores que sean acordes al lugar. Así, por ejemplo, si se trata de una empresa que se dedica a ofrecer servicios tecnológicos lo más apropiado será escoger muebles con formas cuadradas, preferentemente de vidrio o metal. En cambio, si es un buffete de abogados lo ideal sería optar por mobiliario en los que predominen las formas rectangulares o cuadradas para mejorar el espacio, de ese modo se logrará transmitir a los clientes seguridad y fortaleza. De lo contrario, se corre el riesgo de que la clientela se sienta incómoda o, incluso, muestre desconfianza.
Para renovar el mobiliario de tu empresa, entonces, debes tener en cuenta tres cuestiones fundamentales: el diseño, la funcionalidad y el confort.
Los diseños de los muebles de oficina son cada vez más funcionales e innovadores, pues están pensados para lograr un ambiente de trabajo cómodo y, al mismo tiempo, llamativo.
Para la disposición de la oficina, no hay que olvidar ciertos detalles como ser el uso de mamparas o divisiones para ubicar al personal conforme a sus responsabilidades. Las hay de diversos materiales, como madera, vidrio o metal, y con diseños sumamente atractivos, porque además de separar ambientes son un elemento más en la decoración de la empresa. De modo que, aparte de brindar privacidad, le confieren un toque elegante al espacio de trabajo. Pero fundamentalmente es preciso disponer del mobiliario básico, como una mesa o escritorio de líneas sencillas, cuidando que posea las medidas necesarias para poder colocar un ordenador.
Respecto a las sillas, lo ideal es que sean ergonómicas con respaldos rectos o ajustables, para adoptar una posición más cómoda.
Las cajoneras, organizadores y demás muebles pueden ser de madera, aunque el cristal y el metal son otros de los materiales que más suelen elegirse, pues se pueden combinar sin problemas con cualquier estilo decorativo. Siempre lo que más se recomienda es inclinarse por los muebles funcionales, para un mejor aprovechamiento del espacio.
Es importante tener en cuenta que el mobiliario ya no debe ser visto como un mero adorno sino más bien como un elemento estratégico, pues en torno a él se desarrolla el proceso empresarial por completo.
Por ese motivo, tanto el mobiliario de oficina como el diseño de interiores, indisepensables para consolidar espacios, tienen que conjugarse con el ritmo que siguen las empresas.
Las estructuras ligeras, los muebles de líneas rectas y las mesas de oficina, cuya altura puede regularse, se encuentran entre las últimas tendencias en mobiliario para empresas.
Materiales y acabados
La madera, el plástico y el metal, ya sean por separado o combinados, constituyen los materiales que predominan entre los muebles de oficina. En el caso del mobiliario de plástico, como sillas y mesas, presenta la ventaja de ser muebles ligeros, resistentes y fáciles de limpiar.
Por su parte, el mobiliario de madera, de distinta calidad y acabados, le aportan a las oficinas cierta elegancia y distinción. Ya sean de roble, cerezo o arce, o cualquier otro tipo de madera, le confieren a los muebles un aspecto clásico, cuyas tonalidades pueden variar de acuerdo al acabado que posean para una mejor integración estética. Además de caracterizarse por su gran resistencia y durabilidad, se trata de un mobiliario que siempre está vigente.
Los muebles de oficina de metal brindan un estilo moderno y pueden combinarse fácilmente con otros materiales, tales como el cristal.
De este modo, antes de elaborar un plan para renovar el mobiliario de oficina es necesario evaluar cuáles son los muebles que mejor se ajustarán a la imagen de la empresa.
Imágenes:
El color que damos a una estancia no solo tiene valor estético, también es muy importante a la hora de crear un ambiente propicio para la actividad que vamos a hacer en esa estancia. No podemos olvidar que los colores tienen un efecto psicológico sobre las personas, y que influyen directamente sobre la presión de la sangre, los músculos y los nervios. Es decir, pueden resultar relajantes o estimulantes por igual.