Siempre que hablamos de decorar nuestra casa pensamos en las diferentes estancias que la forman, pero casi nunca caemos en la cuenta de que el exterior de tu casa también es una parte de la vivienda, así que también es necesario que lo decoremos.
No olvides que la fachada de tu casa es la primera impresión que reciben tus visitantes, así que debes procurar mantenerla en condiciones, y decorada de manera que resulte agradable. Una buena idea es que empieces por elegir el color de las paredes.
Ante todo, debes tener en cuenta que el color que elijas no debe desentonar con el resto de las casas del vecindario, así que una buena idea es que optes por un color claro, aunque unos toques de oscuro serán un contraste interesante a nivel visual. Si quieres poder limpiarla más fácilmente, puedes recubrirla de algún material como piedra o mayólica.
En cuanto a la puerta principal de la casa, debes tener en cuenta que tiene que ser estética y funcional a la vez, con lo que puedes elegir una de madera, tallada con un diseño acorde pero tiene que ser, también, segura. Actualmente existen modelos con laminas de acero pero aspecto muy decorativo y natural.
También es importante que tengas en cuenta las ventanas de la casa, que deben tener un diseño coherente con el de la puerta y que puedes completar con macetas de flores.
Evidentemente, si tienes un jardín no puedes olvidarte de él a la hora de diseñar la decoración de la parte exterior de tu casa. A parte de hacer crecer tus plantas y arbustos para que le den un toque de color especial y alegre, una buena idea es que lo completes con detalles especiales como un banquito o una pequeña fuente, incluso un estanque con plantas. Y si tienes niños, no olvides de dar rienda suelta a tu creatividad creándoles un pequeño mundo de ensueño, con piedras de colores, muñecos y los ya clásicos y populares gnomos de jardín. Conseguirás que tu jardín quede divertido y a la vez se vea cuidado y diseñado hasta el último detalle. ¡Serás la sensación del barrio!